Todos somos seres únicos y libres desde el momento de nacer, y nuestros padres son nuestros modelos a seguir desde la primera infancia.
Por eso es tan valioso y necesario tratar de ser cada día un buen ejemplo para nuestros hijos, dirigiéndonos con respeto, cariño, enseñándoles valores, buenos hábitos de conducta y a ser autónomos.
En cuanto a la libertad que les damos, está el desarrollo de la autonomía para que el niño sea capaz de realizar por sí mismo sus tareas y actividades acordes a su edad y entorno.
Esta forma de independencia le permite ser más responsable, adquirir más confianza y motivación con lo que está haciendo o aprendiendo, a saber interactuar con sus pares, entre otros beneficios.
Si no les damos libertad, ¿Cómo van a aprender?, errar es humano y tiene más valor si se aprende así.
Complementando esto, también es necesario dejar en claro los límites, ya que si no están establecidos, se genera un caos, como pueden ser las discusiones, desobediencias, y medida que van creciendo esto puede llegar a un descontrol en la adolescencia.
![]() |
| Editorial Planeta |
Un libro que recomiendo es "No quiero crecer", investigación realizada por la Psicóloga chilena Pilar Sordo, que invita a los padres a reflexionar sobre cómo están manejando el crecimiento sus hijos, en un contexto donde se les da todo lo que necesitan, que no es lo que ellos en verdad están pidiendo: afecto, caricias, límites.
Pilar Sordo en su libro menciona algunos elementos que los padres tienen considerar para educar bien a sus hijos, como la ternura, firmeza, fuerza de voluntad, paciencia y sentido del humor.
Comparto un video realizado por la misma psicóloga donde nos explica estos elementos.
¿Y cuál o cuáles de todos de ellos crees que debieras reforzar?
Nos vemos en el próximo post.

No hay comentarios:
Publicar un comentario